Yamaha fz6 s2

La  Yamaha FZ6 S2, una moto apta para practicamente todo lo que se puedas necesitar.
Si tuviera que describir brevemente a esta moto diría que sobretodas las cosas es versátil y polivalente, sirve prácticamente para todo, desde apretarte un viaje de 1000 Km. hasta rodar en un circuito de velocidad y pasártelo bien. Sirve para uso diario, para desplazamientos cortos, pesa poco y es muy manejable y por si fuera poco, el pasajero no ha sido descuidado.

Su apariencia es de moto agresiva, sin llegar a ser las líneas de una deportiva, pero con un frontal muy similar al de la Yamaha R6, semicarenada, manillar alto, asiento “corrido” y amplio, motor en negro igual que el chasis y un neumático trasero con 180 mm. de ancho. Pero que nadie se engañe, insisto, la Fazer no es una deportiva como he oído por ahí aunque su comportamiento como veremos, da para divertirse con ella y mucho, un buen piloto la sacará buen provecho e incluso sacará buenos tiempos en el circuíto, de eso no me cabe la menor duda.
Arrancando y primeras sensaciones

Cuando te subes, la moto parece más pequeña de lo que realmente es, esa sensación se mantiene también en la conducción y la verdad es que esto inspira mucha confianza, sobre todo porque la moto es ágil y manejable, y no solo lo es, también lo transmite así, parece una tontería pero los moteros de “la vieja guardia sabéis que esto es fundamental para facilitar la conducción”.

El embrague es suave y la caja de cambios muy precisa, seis marchas y todas ellas empujan bien, quizás algo pobre en bajos y medios para hablar de una moto de 98 CV, sobretodo en la salida, pero si pasas de 8000 vueltas, hasta las 14.000 que tiene la zona roja, notarás que empuja bastante bien para hablar de una “ 600”. Vale vale, ya sé que no es una deportiva y esto se nota en las salidas de curva, pero ofrece sensación de poderío y tiene carácter.

Yamaha FZ6 Fazer S2
El manillar es estrecho y elevado, para mi gusto demasiado estrecho (Una tendencia de casi todas las marcas)   pero hay que reconocer que es realmente funcional, puedes meterte entre los coches sin problemas. Moverte entre el tráfico es uno de los puntos fuertes de la Fazer 600, y en ruta favorece una postura muy cómoda. Los espejos quedan elevados y con buena visibilidad pasando por encima de los de los coches.

Cuadro de instrumentos

El cuadro de instrumentos se ve bien en todas las condiciones, bien integrado aunque solo ofrece la información básica: Velocímetro, temperatura del motor, reloj, dos odómetros parciales y el cuentakilómetros total, indicador de gasolina (Que tarda casi la mitad de su autonomía en descender una raya, luego cae en picado), todo esto digital, luego tenemos el indicador de revoluciones en formato clásico y los “chivatos» luminosos de punto muerto, inyección, aceite y alarma de luz intermitente de la llave codificada. Un indicador de marcha engranada le vendría bien.

Las piñas de los mandos contienen lo habitual, pero destacamos el botón de doble intermitente (Warning), ese que tanto echamos de menos en otros modelos de las competencia, otro tanto que se apunta Yamaha en los detalles.

 

 

Rodando con ella
Ya en marcha, la protección aerodinámica es excelente, parece mentira que una cúpula tan baja proteja tanto y tan bien, puedes rodar a ritmos elevados y apenas notarás las turbulencias, ni tu ni el pasajero, el cuello no sufre y viajas relajado, si te agachas un poco entonces puedes casi que fumarte un cigarrillo.
Su comportamiento en general es suave y responde bien al acelerador, pero a partir de 7000 revoluciones la moto vibra como si se tratara de una bicilíndrica, esto significa que un viaje con dos pasajeros , a una velocidad media quizás algo elevada se acaba notando y te pasará factura. Sencillo de solucionar poniendo un simple silentblock en las torretas del manillar aunque esto le corresponde al fabricante. Sin embargo en los estribos la transferencia de estas vibraciones es prácticamente inexistente, tanto en el conductor como en el pasajero. Van recubiertas con goma y además no resbalan, el pie asienta bien y su posición no es muy atrasada por lo que tardarás en notar cansancio en las piernas.

 

 

La posición del conductor es ideal para viajes de largo recorrido, muy similar a llevar una moto de trail, confort garantizado incluso después de meterte 700 Km. seguidos para el cuerpo como hemos hecho nosotros. Quizás se podría mejorar la autonomía dando algo más de tamaño al depósito y así mejorar sus prestacciones ruteras, ya que cada 200 Km. hay que parar a repostar (Hablamos de viajar con pasajero), el consumo con dos pasajeros y carga mínima de equipaje ronda los 9 litros si ruedas un poco alegre. El depósito se llena con unos 18 euros. Si ruedas habitualmente solo, la autonomía se dispara hasta 265 Km. ¿No está mal, eh?, y luego en reserva puedes rodar otros 40-50 Km. más también constatados. El pasajero en rutas largas no disfrutará tanto, el asiento esta bien acolchado y es mullido, pero los dos escapes por debajo del asiento generan un calor que en pleno verano y con las temperaturas que ya tenemos sin hacer nada puede ser algo molesto, esto les pasa a prácticamente todas las motos que llevan los silenciosos en esta ubicación. Las agarraderas son estrechas y complicadas de sujetarte si eres de caderas algo anchas, pero cumplen perfectamente con su cometido, además de permitirte atar un pulpo a ellas si viajas solo y decides sujetar el equipaje en el asiento trasero.

 

Frenos. Detener la moto es sencillísimo, creo que es de lo mejor que tiene la Fazer, una frenada muy progresiva y sin sustos encargada a dos discos de 298 mm. Con pinzas monobloque realmente efectivas. No importa el ritmo que lleves, si vas solo o con “paquete”, los frenos no decepcionan. El trasero cumple con mención de honor.
La suspensión es una delicia, la delantera es telescópica y no es regulable y a no ser que tu apellido sea Rossi, no vas a necesitar tocar nada incluso en la conducción más extrema o en el peor de los asfaltos. La trasera es del tipo Swing arm regulable en la precarga y extensión y además de forma muy sencilla ya que el amortiguador viene numerado, cualquiera puede regularla sin tener que hacer un cursillo universitario sobre este tema. Me ha encantado la suspensión de la Fazer S2, había leído malas criticas de ella, pero insisto, si no te apellidas Rossi, la vas a disfrutar y no echarás nada en falta en este aspecto.
Después de la prueba en autopista con pasajero, donde la moto, como decía, no muestra todo su potencial, decidí probarla en puerto de montaña y zonas de curvas, muchas curvas, nada mejor que hacerlo acompañado de compañeros con deportivas puras, para ver como se desenvolvía a su lado, quería descubrir el lado más gamberro de la Fazer. Aquí y conduciendo solo, he descubierto a otra moto muy diferente de la rutera de autopistas, muy ligera y manejable, el truco para gozarla a tope esta en llevarla siempre alta de vueltas, y aunque es cierto que incluso así en algunos momentos vas a echar en falta algo mas de empuje, sobretodo cuando a las salidas de las curvas ves como tus compañeros con 600 deportivas abren gas y se alejan de ti. La aceleración es más que aceptable. El paso por curva es firme y con aplomo, ni pestañea, esto me ha sorprendido, sobretodo por la permanente sensación de ligereza, y aunque el manillar no ayuda a «contramanillear» por su estrechez y posición elevada, puedes tumbar y tumbar, el límite lo pondrás tu no la moto. Lo de tocar con los estribos con esa facilidad que he leído por ahí, me sospecho que lo que hay es mucho fantasma, y si no es eso, entonces hablamos de probadores con una conducción absolutamente suicida y de las que ponen en peligro la vida de los demás. Nuestros ritmos son bastante altos y en ningún momento hemos raspado con los estribos, esto habla de lo bien diseñada que esta en este aspecto. La Fazer S2 viene con caballete de serie y no hay que preocuparse, tampoco rozarás con él por más que apures (A no ser que la metas en circuito donde lo aconsejable es retirarlo).
Cuando llegas a casa y te toca guardarla en el garage, la mueves en parado con mucha facilidad, cualquiera se hace con ella incluso las chicas menos robustas no tendrán problemas. La altura del sillín la hace apta para la mayoría del público. Yamaha pone a disposición de los propietarios de la Fazer un amplio repertorio de complementos y accesorios enfocados principalmente a los más ruteros.
Record de ventas durante muchos años y ahora sé que por méritos propios. Polivalente y moto para todo, destacando en esto sobre su competencia, porque en su versatilidad creo que es donde radica su fuerza, sirve para lo que la necesites y en todo saca buena nota

The machine

fotor_wp_ss_20150920_0006

 

Yamaha ha hecho un despliegue curioso con su FZ6, la Yamaha más vendida de la historia, y es que ya se han «despachado» 250.000 unidades en Europa. Esta cifra impone sobre todo si tenemos en cuenta la antigüedad del modelo (desde 1998).
Los ingenieros de la casa japonesa han decidido ampliar la gama, ahora hay dos versiones de cada modelo y a eso hay que añadirle que las semicarenadas, que se apellidan como siempre Fazer, están disponibles con ABS. Por un lado y como principal novedad, aunque ya estén en el mercado, tenemos a las FZ6 S2. Las S2 (naked y semicarenada) son la evolución de lo que teníamos en el mercado en 2006. Éstas han recibido básicamente retoques en la parte ciclo.

Por otro lado tenemos a la pareja formada por la FZ6 (sin carenado) y FZ6 Fazer (con semicarenado) que han sido limitadas a 78 CV y mantienen en la parte ciclo las características de las motos del año pasado. Desde fuera las decoraciones son lo más llamativo, ya que para diferenciar a las S2 de las FZ6 hay que fi jarse en las pinzas de freno y en el acabado de la horquilla, ahora en negro. Pero si te subes en ellas sí que ves algo distinto, y es que ahora el cuadro de mandos es igual que el utilizado en la FZ1, mucho más moderno y compacto.

Gracias a él mejora la lectura y se ofrece la misma información, con el práctico nivel de combustible y los datos a los que los marcadores digitales nos tienen acostumbrados. El asiento recibe nueva forma y un mullido de diferentes densidades, además los estribos del acompañante están más bajos, vuestra pareja ya no tiene excusa… si es que la tenía en una moto de sus características. Como es habitual en la marca desde hace bastante tiempo la calidad de los acabados es alta.

En su sitio

Lo que encontramos en las nuevas S2 es lo que ha hecho de las FZ6 unas motos tan exitosas, es decir, un conjunto que lo tiene casi todo en su sitio. Hay pequeñas pegas que no han sido solucionadas, como el tacto del amortiguador sin bieletas y el pequeño vacío en medios del motor; pero que, por otro lado, no son en absoluto una limitación para que los miles de usuarios de esta familia disfruten de ella. Por la posición de conducción es una moto para todos, dado que su asiento está a una altura justa, el manillar de correctas dimensiones coloca los brazos en una posición natural y los estribos, que rozan si te empeñas, están bien ubicados. Esto hace que las FZ6, ambas tienen la misma posición a los mandos, sean fáciles de llevar desde el inicio y cómodas a largo plazo.

Está claro que si lo que se busca es comodidad de marcha habrá que recurrir a la FZ6 Fazer, que con su carenado superior protege mucho más al piloto y permite viajar a buen ritmo. En cambio los que se decanten por el diseño en las motos y no piensen en viajar a alta velocidad, tienen en la FZ6 «a secas» a su compañera de aventuras. Además, la sensación que se tiene una vez subido en ella es bastante diferente, debido a que si bien la posición es la misma, nuestros ojos nos dicen que la moto es mucho más pequeña, al tener tan sólo los relojes entre la carretera y el piloto. El trazado elegido para poner a prueba los nuevos modelos de Yamaha contaba con diferentes tramos de todo tipo de carreteras y autopista, de tal modo que pudimos ver la respuesta de las monturas bajo las más diversas circunstancias. El buen comportamiento general al que las FZ6 nos tienen acostumbrados salió a relucir, mostrando aplomo en curvas rápidas y agilidad en las del chasis y por otro la palanca que ejerce el manillar, hacen que la moto obedezca bien las ordenes del piloto. Las suspensiones siguen como ya las conocíamos y en zonas muy rizadas el amortiguador peca un poco de seco, al igual que en fuertes reducciones combinadas con el freno trasero. La horquilla absorbe y aguanta con corrección. En los frenos sí encontramos novedades, que tienen efecto práctico y visual. Las pinzas monobloque, que muchos recordarán de las Yamaha deportivas de mediados- fi nales de los noventa, han conseguido que ya nadie se pueda quejar de los frenos de las FZ6. No tienen las características de las que montan los modelos más deportivos, pero poseen sufi ciente potencia de frenado. Los que quieran disponer de la tecnología ABS tendrán que decantarse por las Fazer, ya que son las únicas en equiparlo.

El toque deportivo

Sin duda, el aspecto más deportivo de las S2 está en el propulsor, que este año recibe pocas modifi caciones, pero que ya disponía de buenas prestaciones y carácterj en la versión anterior. En su día se rebajó la potencia hasta los 98 CV declarados para que esta mecánica se adaptase a las condiciones del segmento de las naked y las semicarendas. Dentro de ellas, las Yamaha han tenido unas buenas cifras y este han año han decidido ser conservadores con ellas. El cuatro cilindros en línea es un motor potente y muy divertido cuando se «exprime» en busca de la zona roja. Es a alto régimen donde muestra una mejor respuesta, dado que en medios todavía aparece cierto bache en aperturas grandes del acelerador. Su desarrollo no muy largo y la facilidad para subir de vueltas hacen que en carretera ofrezca buenas sensaciones. En bajos cumple bien y emite un característico jsonido en toda la gama. El tacto del cambio es un poco tosco en las primeras marchas, pero en un par de operaciones ya pasa desapercibido.

Unos pocos retoques le han bastado a la FZ6 S2 y a la FZ6 Fazer S2 para seguir siendo el objeto de deseo de muchos y muchas, además ahora con los avances introducidos en la parte ciclo ha mejorado su equilibrio. Prepárate porque las FZ6 ya están en la segunda parte

 

Soy motero

Yo considero que eso de ser motero se lleva en la sangre, es una actitud ante la vida. Un motero no deja de serlo por ir en coche o andando… Un motero es una persona solidaria, entusiasmada por vivir, aunque tenga sus riesgos, pero como dice Alejandro Sanz, lo más peligroso que tiene la vida es vivirla. Un motero es una persona educada, que generalmente da paso a otros, saluda siempre que puede, un motero es alguien con un sentido del espacio tiempo diferente a quien no lo es, un motero requiere de una destreza y unos reflejos superiores, concentración, armonía y sobre todo EQUILIBRIO. Todo esto aderezado con un puntito de locura (de esto último estoy yo sobrado).

Por tanto aunque a veces no lo logre, yo desde que me levanto hasta que me acuesto, por encima de todas las cosas e independientemente de que vaya en moto o no, SOY MOTERO. Es una pena que no todo el mundo pueda decir lo mismo.